Como ya sabéis, hacer del sandwich un producto diferente, que incluso alcance la categoría de “plato completo” no solo es posible, sino que os lo venimos demostrando desde el día 4 de enero, cuando abrimos este blog que ya lleva cuatro meses de recorrido en la blogosfera y con el que Natalia y yo estamos disfrutando como enanas.
Hay semanas en las que nuestros sandwiches son justo eso, un “gran plato” lleno de propiedades en los que la combinación de ingredientes lo convierten en un auténtico plato único, sin necesidad de más. Otros días nuestros sandwiches son el aliado perfecto de una cena o de una merienda cena ligera; y hay veces como en el caso de hoy, en el que con tan solo dos ingredientes conseguimos un relleno nada usual con el que sorprender en esas ocasiones en las que, sin pensarlo, hay que preparar una cena rápida en casa.
Quizás los dos ingredientes de la receta no estén siempre en vuestras despensas. Ha llegado la hora de poner fin a esto. Tanto el queso mascarpone como los tomates secos en aceite son dos productos que podemos utilizar en multitud de recetas. El mascarpone, contundente y calórico donde los haya (who cares?), técnicamente hablando no es un queso, sino el resultado de añadir un cultivo de bacterias a la nata extraída de la leche que se usa en la fabricación del parmesano. Después de agregar el cultivo de bacterias a la nata, se calienta suavemente, luego se deja que madure y espese. Es un producto muy delicado que debe ser consumido fresco porque se pone rancio rápidamente. Si queremos, incluso podemos hacerlo en casa y de manera muy fácil, echad un vistazo a este enlace y os daréis cuenta de lo sencillo que es.
El segundo ingrediente, es uno de mis fijos en la despensa, tanto en su versión deshidratada, sin más, como en aceite. Con pasta, en ensaladas, con legumbres…van bien en multitud de recetas, y como no, en un sandwich también.
Ingredientes (para 1 sandwich)
• 6 tomates secos en aceite de oliva
• 2 cucharadas (tbsp) de queso mascarpone
• Pan de vuestra elección (preferiblemente que tenga una miga densa)
Elaboración
1. Ponemos los dos ingredientes en un recipiente donde poder trabajar con nuestra batidora de brazo y mezclar hasta obtener una pasta.
2. En una sarten bien caliente ponemos un poco de mantequilla y cuando esté derretida tostamos nuestras rebanadas de pan sólo por una cara.
3. Untamos las rebanadas por las caras no tostadas y unimos.
Creo que más fácil es imposible. Probadlo y decidnos qué os parece. A nosotras nos ha encantado.
Buen fin de semana.
Gloria.
Estupenda idea de untable con productos sencillos que suelo tener siempre en casa!
Me llevo un trozo!
Besos y feliz fin de semana,
Palmira
Gracias Palmira!! Ya verás como una vez que lo preparas, repites muy a menudo. Además puedes ir jugando con los tomates que pones y la cantidad de mascarpone hasta dar con tu «fórmula».