Hemos llegado al primer viernes de febrero sin darnos cuenta. Entramos en un nuevo fin de semana en el que tendremos tiempo para preparar cosas nuevas en la cocina y desde aquí os animamos a preparar esta delicia con algo de historia y que hemos versionado para convertirla en sandwich.
No hace mucho descubrí la salsa almadroc, cuyo nombre parece ser que proviene de un cruce de la palabra “moretum” (aderezo o salsa) con el árabe «madrus», (picado).
El almadroc o almedroc, es, en efecto, una picadura o incluso, un tipo de allioli (ajoaceite) con queso. Por lo tanto, nos reporta a la vez en la Grecia clásica y a la cultura árabe donde esta salsa ya era conocida. De hecho, la alta cocina romana era ejercida por cocineros griegos, que continúan el saber clásico y, a través de los bizantinos, lo transmitirán a los islámicos turcos. Por eso todavía hoy en el este de Europa se hace una salsa similar, a base de ajo, también de origen clásico: la skordalia griega.
Pues bien, esta emulsión, a partir de ajo, aceite y queso, sirve de excelente base para un sandwich gourmet donde los haya y súper fácil de preparar dándole cuerpo a esa salsa con nuestro amigo el huevo.
Ingredientes
- 2 huevos cocidos L
- 1 diente de ajo pequeño
- 60 gramos de queso parmesano
- 1 cucharada (tbsp) y media de aceite de oliva virgen extra
- Sal, pimienta
- Dos rebanadas de pan (Oroweat Avena)
Elaboración
- En el vaso de nuestra jarra batidora o de nuestra batidora de mano ponemos los huevos cocidos troceados, el diente de ajo y el queso. Trituramos hasta obtener una pasta arenosa.
- A continuación añadimos el aceite de oliva, y salpimentamos. Seguimos triturando hasta obtener nuestra pasta, añadiendo algo más de aceite si vemos que queda demasiado seca.
En mi caso, he añadido a esta pasta como contraste y antes de cerrar el sandwich una cucharadita de melaza en hilo y he espolvoreado algo de perejil seco. El toque dulce le va de maravilla.
Buen fin de semana y volvemos el lunes.
Gloria.
Delicioso!!!
Gracias!