La primera semana de septiembre acaba de irse. Increíble. Pronto estamos preparándonos para la operación bikini del 2017. Mientras tanto y pensando en que mi adorado otoño-invierno se acerca, vamos a preparar hoy un sandwich con dos ingredientes que si bien ya se pueden encontrar en cualquier época del año, son más propios de los últimos meses del año: la manzana y la calabaza. La primera, desde agosto hasta enero está en su mejor momento, mientras que la segunda es entre abril y noviembre donde deberíamos consumirla.  Así que como estamos en un mes en el que ambas  son alimentos de temporada, qué mejor que hacerlas hoy protagonistas de nuestro sandwich.

Sobre la manzana os puedo contar que además de ser verde (Granny Smith, Verde Doncella), amarilla (Golden, Gala y Reineta) o rojiza (Early Red One, Red Delicious y Starking), se cree que ya existía en la prehistoria, al haberse encontrado restos en excavaciones neolíticas. En el siglo XII a.C. se cultivaban ya manzanos en los valles del Nilo, y en la península ibérica se introdujo por romanos y árabes, siendo los conquistadores españoles quienes llevaron su cultivo al Nuevo Mundo, desde donde años después llegó a América del Norte, África septentrional y Australia. España sigue siendo uno de sus principales productores donde tenemos una Denominación de Origen Protegida: Manzana del Bierzo, y una Indicación Geográfica Protegida: Manzana de Girona.

Y nuestra amiga la calabaza llego a nosotros dando un buen rodeo: desde Asia hasta América Central y, a partir de allí, llegó tanto al sur como al norte de este continente. Sin embargo, no fue hasta el siglo XV cuando los españoles introdujeron la calabaza en Europa, donde se propagó en mayor medida por los países de clima más cálido.

Tanto la manzana como la calabaza están compuestas mayormente por agua y son buena fuente de fibra, tienen escaso valor calórico y son muy hidratantes. Está claro entonces que el sandwich de hoy lo tiene todo para ser un éxito. Vamos a ello.

Ingredientes

• Media manzana Granny Smith
• Un poco de queso azul desmigado
• Calabaza rallada
• Pesto clásico (el de albahaca).
• Hojas verdes al gusto (yo he utilizado para este sandwich canónigos)
• Aceite de Oliva Virgen Extra
• Dos rebanadas de pan (en este caso he utilizado un Flat 12 cereales de Oroweat)

Elaboración

1. Untamos las dos partes de nuestro panecillo o las dos rebanadas del pan escogido con un chorrito de AOVE.
2. Sobre una de ellas ponemos la manzana cortada en rodajas finas.
3. Sobre la otra ponemos unas hojas de canónigos (o la hoja verde que hayáis escogido), la calabaza rallada, una cucharada de pesto y sobre todo ello el queso azul desmigado.
4. Tapamos con cuidado con la mitad que tiene las manzanas.

No os cuento lo rico que está, mejor me lo contáis vosotros uno de estos días.

Buen fin de semana.

Gloria.