Lunes. Empezamos una nueva semana. Y queramos o no, comienza la cuenta atrás. Porque da igual que os guste o que no. El sonido de las campanillas y esas vocecillas infernales de los villancicos ya están rondando por todas las esquinas. Y este año no tengo claro quién se ha adelantado. Si el Corte Inglés o Zara. Porque hace unas semanas que buscando un plato bonito (algo raro en mí 😉 ) pensé que había perdido un mes de mi vida. En fin, queramos o no, ha llegado. Incluso nosotras empezamos a pensar en sandwiches especiales para estas fechas. Porque éste que os traigo hoy, con salmón y manzana especiada, bien puede ser un aperitivo en la cena de Nochebuena.
Porque nosotras somo así. Pensamos en todo. Y aunque lo más probable es que ambas rebanadas tengamos algún lazo familiar con Mr Scrooge, en el fondo lo que nos importa es la gastronomía. Porque si como siempre decimos, nos hemos propuesto convertir el sandwich en un producto gourmet, en estas fechas con más motivo.
Creo que pueden ser parte de los aperitivos. Algo sencillo, pero al mismo tiempo delicioso. ¿No estáis de acuerdo conmigo? Sí. Lo sé.
Y como me encanta cocinar con especias, me chifla el salmón y como buena asturiana, las manzanas no pueden faltar. Aquí está el resultado. Combinamos todo eso y tenemos un sandwich de lujo.
Ingredientes:
- 2 rebanadas del pan que más os guste. Yo he utilizado un pan de molde alemán con cereales.
- 1 manzana pequeña
- salmón ahumado
- 1 rabanito
- rúcula
- aceite de oliva
- 1 (tsp) cucharadita de jengibre fresco rallado
- 1/2 (tsp) cucharadita de curry
- 1/4 (tsp) cucharadita de cúrcuma
- pizca de nuez moscada
- 1 (tbsp) cucharada de ralladura de limón
- Nuestra Pasta de Judías Blancas
- copos de chile seco
Elaboración:
- Pelamos la manzana, le quitamos el corazón y la cortamos en daditos.
- En una sartén, ponemos 1 cucharada y media de aceite de oliva y añadimos las especias y el jengibre fresco. Tostamos ligeramente sin que se quemen. Añadimos la manzana y la ralladura de limón. Mezclamos todo bien y cocinamos unos 8-10 minutos. La manzana no debe hacerse compota.
- Untamos una de las rebanadas de pan con la Pasta de Judías, colocamos la rúcula y el salmón ahumado.
- Repartimos la manzana y las rodajas de rabanito.
- Espolvoreamos unos copos de chile seco.
- Solo queda tapar y disfrutar.
¿Por qué debéis apuntarlo en vuestra lista de «tareas pendientes»? Porque lo digo yo y porque está muy rico.
Nos vemos el miércoles.
Natalia.
mmmmmmmm, mmmmmmmmmmmmmmm, mmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmm!!!!
Y si el salmón lo preparas en casa, ya si que si 😀
¡¡que rico!!